martes, 6 de abril de 2010

Venezuela pide ayuda una vez más

Venezuela, la patria pide que todos sus hijos e hijas quienes viven en esta hermosa pero maltratada tierra, se pongan de acuerdo, ya que me están destruyendo y al mismo tiempo se están destruyendo. La marginalidad crece galopantemente, la pobreza critica aumenta, me destruyen la naturaleza, las fuentes de aguas las contaminas, los bosques desaparecen, en fin todo es destrucción, abandono y desidia del los Gobiernos Regionales, Estatales y del Gobierno Nacional.
Solo escucho dimes y diretes, politiquerías, falsas promesas, compra de armamento militares, de armas que no llevan a la Paz ni mucho menos a la armonía y prosperidad de una Nación. Ya se sabe que las guerras y el odio traen destrucción, miseria, hambre, atrasos y muertes innecesarias.
Pobre el hombre o mujer que levante la mano en contra de sus hijos, hermanos, amigos, vecinos. pobre del Gobernante que quiere someter a la población bajo su ferra mano, para mandar a su antojo. Recuerde que la vida no es eterna, el poder mucho menos y lo que si es seguro en este mundo es la muerte. que patria quiere un tirano para sus hijos, todo tirano, nunca duerme bien siempre esta pendiente de que esta haciendo el otro en su contra, quien actúa con amor recibe dicha, amor y prosperidad y vive por siempre en paz.
Dios bendice y premia a sus hijos de buena voluntad, a los que viven en el amor, en el respeto, a los humildes, a los rico0s de corazón y de espiritu.
hay del hijo que se vuelca en contra de su madre, nunca tendrá paz, no conocerá el perdón pero si la ira del Señor.
El que oprime a su pueblo bajo el terror, el engaño y el autoritarismo, nunca lograra ser feliz, siempre vivirá y gobernará bajo el miedo de ser derrotado, asesinado. no conocerá lo que es vivir en paz, alegría, en la dicha y en el amor de una familia, de un amigo, de un vecino, de un pueblo que lo ame y lo respete. siempre tendrá pesadillas de perseguido, sera maldito e incluso después de la muerte, no morirá en paz, los remordimientos pincharan y lastimaran sus entrañas, su mente, su alma. Igual al rico codicioso, que se aferra a su fortuna y no se permite ser feliz, es un avaro eternamente rico en dinero pero solo, abandonado, pobre de espiritu, de alma y ruin de corazón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario